domingo, 14 de mayo de 2017

Apostillas al refranero. Añoranzas y lembranzas


         En las temporadas en que me veo obligado a residir en Madrid, mi primo Ángel Blázquez me pasa La Gaceta de Salamanca, cosa que le agradezco un montón. En la del martes, 25 de abril de 2017, se recoge un artículo, Defensa del español, en que se habla de una serie de personas salmantinas o muy relacionadas con Salamanca, miembros de la Real Academia Española de la Lengua. Y pensativo, admirado, sorprendido, y agradecido al autor he pasado un buen rato con recuerdos, pues de entre las ocho personas que cita, por una razón u otra, conozco a seis; y de las seis hay tres con las que me relacioné en mi época joven: Fernando Lázaro Carreter, José Antonio Pascual y Paz Battaner. Don Fernando fue profesor mío de Gramática General y Crítica Literaria a lo largo de los cinco años de carrera, dirigió los cursos del CAP que me permitieron dedicarme a la docencia y dirigió mi tesina cuando me licencié en 1966. Tomó posesión del sillón R de la RAEL en 1972 y fue director de la institución entre 1991 y 1998. En 1974 lo visité en su despacho de la Universidad Autónoma de Madrid para pedirle dirigiera mi tesis doctoral, pero me dio amables calabazas por falta de tiempo. De José Antonio guardo entrañable recuerdo. Estudiaba dos cursos antes que yo y nada más terminar la carrera fue ayudante de don José Luis Pensado. Cuando yo comenzaba quinto, Pensado pasó un curso entero en EEUU y fue sustituido por José Antonio que impartió unas clases excelentes en ciencia y método. Una delicia. Ocupa el sillón k, del que tomó posesión en 2002. Lleva ocho años como vicedirector de la “docta casa”. A Paz (sillón s) no la conocí ya en Salamanca, aunque sí oí hablar mucho de ella y de que había obtenido la cátedra de un instituto de Vitoria nada más acabar la carrera. Sorprendentemente la conocería en Vitoria, pues fui aceptado como profesor no numerario del instituto Federico Baraibar, cuya sede era el edificio del actual Parlamento vasco. Como ella, mujer inquieta, se encontrara en Barcelona haciendo nuevas oposiciones hube de sustituirla durante los primeros meses en dos grupos. Jefa excelente y orientadora magnífica.

RECUERDA:

Hayamos paz y viviremos asaz
Siembra en haz y cogerás en paz
No pica la abeja a quien en su paz la deja
Penas que no sueltas, penas que indigestan
La vida de la aldea dela Dios a quien la desea
Matrimonio y señorío no quieren furia ni brío
Cuanto sabes no dirás, cuanto ves no juzgarás, si quieres vivir en paz

 Al que se hace de miel, le pican las moscas

2 comentarios:

  1. Bonitos y entrañables recuerdos de juventud y de inicios de carrera, tuviste amistades y contactos con personas relevantes en el mundo de la docencia, donde, seguramente, lo pasaste muy bien. Es importante tener buenos recuerdos. También lo son las actividades en las que estás inmerso, que te llenan la vida.(disculpa si hay errores, mi corrector está en otra lengua),Un abrazo .

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  2. Gracias, Ramón: Fue una época muy bonita.

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