Una de las virtudes más admiradas en todos los pueblos de todas las épocas es la que a mí me hace falta: la paciencia, cuyo símbolo hecho carne es Job, el hombre que, a pesar de los pesares, no pierde la fe en su Dios. En la medicina antigua recibía el nombre de flema y era considerada como uno de los cuatro humores básicos del organismo, junto con la sangre, la bilis y la atrabilis o bilis negra.
RECUERDA:
Paciencia es paz y ciencia
A quien espera, su bien le llega
Nunca es tarde si la dicha es buena
Sufrir y callar y mejor tiempo esperar
A cualquier dolencia, remedio paciencia
La dicha que tarda con gusto se aguarda
A cualquier dolencia, remedio paciencia
La dicha que tarda con gusto se aguarda
Tiempo vendrá en que el triste se alegrará
Ni lo dulce ni lo amargo duran tiempo largo
El que espera desespera
No hay mal que cien años dure ni gitano que lo aguante
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