Es la viruela enfermedad propia de la infancia que no suele aparecer en edades avanzadas; por eso, cuando un anciano hace cosas impropias de su senectud exclamamos con sorna: 'A la vejez, viruelas'. No nos extrañemos, porque 'el que de joven no corre, de viejo trota' y 'mientras moza, buen pasar; después de vieja, trotar', que 'todos somos iguales, pajaricos y pardales', masculinos y menosculonas (¿o femeninas?). Pienso yo que 'el viejo pajar, cuando se enciende, malo es de apagar'. Alguien argüirá que a ciertas edades ya solo quedan 'arriba canas y abajo ganas' y que 'a jaula abierta, pájaro muerto'. Con mucha razón añadirá: '¿Qué hace con la moza el viejo? Hijos huérfanos', y que 'viejo que con moza casó o vive cabrito o muere cabrón'. De todos modos, como soy biempensado, pienso, repienso y vuelvo a repensar: 'Viejo amador, invierno con flor'.
No hay comentarios:
Publicar un comentario